Debido a la incapacidad de la cadena de suministro para satisfacer el aumento del consumo de electricidad, se espera que las importaciones cubran el 80% de la demanda de transformadores de potencia.

EE.UU.: La consultora energética Wood Mackenzie afirma que se espera que para 2025, Estados Unidos enfrente una escasez del 30% de transformadores de energía y una escasez del 10% de equipos de distribución, lo que obligará a las empresas de servicios públicos a depender en gran medida de las importaciones para satisfacer la demanda.

La compañía afirmó en su informe "Desbloqueando la crisis de la cadena de suministro de transformadores en EE. UU." que, desde 2019, la demanda de transformadores de potencia ha aumentado un 116 %, mientras que la de transformadores de distribución ha aumentado un 41 %, debido al aumento del consumo eléctrico y al envejecimiento de la infraestructura. Desde 2020, el consumo eléctrico en Estados Unidos ha aumentado un 7 %, revirtiendo una década de tendencia a la baja.

Ben Boucher, analista sénior de Wood Mackenzie, afirmó: «La capacidad de fabricación nacional no ha podido mantener el ritmo. Para 2025, las importaciones representarán aproximadamente el 80 % del suministro de transformadores de potencia en EE. UU. y el 50 % del suministro de transformadores de distribución. Este desequilibrio está incrementando los costos y los ciclos de entrega, lo que retrasa los proyectos de red necesarios para satisfacer la creciente demanda».

Se espera que los cambios de política y los nuevos aranceles empeoren la situación. El proyecto de ley "OBBBA" recientemente aprobado reducirá el apoyo a la energía limpia y afectará la demanda de transformadores elevadores. Se espera que los próximos aranceles, incluido un arancel del 50% sobre el cobre a partir de agosto, aumenten el costo de los transformadores importados y de producción nacional.

Desde 2023, los fabricantes de equipos originales han anunciado una expansión de capacidad de $1.800 en Norteamérica. Sin embargo, se necesita más inversión para estabilizar el suministro.

Boucher afirmó: «El mercado estadounidense de transformadores se encuentra en un momento crítico». Enfatizó que la estandarización, la inversión en mano de obra y la seguridad de las materias primas son cruciales para evitar la escasez a largo plazo y el aumento de costos.